Texto: Daniel Cáp. 1:8-20
Introducción:
Al estar dedicados a Dios a quien servimos, debemos estar consientes de los ataques del enemigo, y que este no escatimara ningún esfuerzo por destruirnos y hacernos caer en pecado, es ahí en donde es puesta a prueba nuestra santidad y fidelidad a Dios.
Es en el año 607 a.C. es cuando se da la invasión a Jerusalén, y Nabucodonosor rey de Babilonia, se trae parte de los utensilios de la templo en Jerusalén, también de la familia real y, por lo tanto a la nobleza. Dentro de ellos a Daniel y los tres jóvenes.
Propósito: Consagración.
Mensaje:
- Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la comida del rey. Vrs. 8
- Porque la comida del rey era dedicada a los dioses paganos de Babilonia. Dioses a los que el rey rendía culto y por eso Daniel no la quizo comer de ellos.
- Al parecer también el vino que bebía el rey según la creencia de los babilonios traía sabiduría para las personas que lo bebían pues era dedicado a los dioses de ellos.
- Pero Daniel sabiendo que todo esto que era dedicado a los dioses paganos; no quiso pecar contra JEHOVA contaminándose con estos alimentos.
2. Daniel propuso al jefe de los eunucos que probara por diez días con legumbres y agua para ellos. Vrs. 11-12
- Daniel era tan fiel a Dios, que desafió al jefe de los eunucos a probar por diez días que se les diera a comer legumbres y agua las cuales no eran parte de la dieta del rey.
- Con esto Daniel busca agradar a Dios y demostrar que no es sometiéndose a lo que el mundo hace como vamos a triunfar en la vida, sino buscando agradar a Dios con una vida consagrada es como vamos a triunfar.
3. Daniel recibe el respaldo de Dios por su santidad y La Fidelidad a Dios. Vrs. 17-20.
- Daniel pudo ver el fruto de su santidad y fidelidad a Dios, santidad es igual a decir (dedicado a Dios) y fidelidad es (ser hallado haciendo lo que se nos ha encomendado). Dios mira la Santidad y la Fidelidad hacia él como una ofrenda de parte de sus hijos que buscan agradarle.
- Daniel y los otros jóvenes fueron hallados diez veces mejores en todo asunto que el rey les consultó, más que los magos de ese reino. A Dios sea la gloria.
Conclusión:
Si nosotros estamos determinados y decididos a guardarnos en santidad y fidelidad a Dios también veremos el fruto de esto en nuestra vida, como Daniel lo pudo ver también nosotros lo veremos si nos guardamos para Dios.
